Le mandamos un cordial saludo a todos nuestros seguidores, y les platicamos nuevamente las noticias relevantes de estas primeras semana de Enero, en donde pudimos presenciar al INE iniciando con el proceso de revocación de mandato a regañadientes, el incongruente aumento de sueldo de los Diputados por concepto de gasolina y el portazo en la cara a la esperanza de todos que fue el inicio de esta cuarta ola de covid-19.
Todos sabemos los gritos y sombrerazos que se han estado dando el Instituto Nacional Electoral y la administración del presidente AMLO; que si te recorto el presupuesto, que si el otro suspende el proceso, entonces te denuncio penalmente y amenazo con juicio político, y termina cediendo el pobre instituto autónomo, por ahora.
En el Estado ya se han instalado los consejos distritales para capacitar a las personas que verificarán la legalidad del proceso, y en tales actos solemnes donde únicamente se leen actas, pudimos escuchar el recuento de la historia desde el punto de vista de los funcionarios encargados, insistiendo en que se les está pidiendo algo ilegal, pues en la propia ley sobre la revocación de mandato se exige que tal proceso sea de las mismas proporciones que la elección presidencial, y es importante recordar que las autoridades están obligadas a actuar dentro del marco normativo que les corresponda, por lo que, por un lado, si reducen este proceso de manera discrecional, estarían yendo en contra de dicha ley, y por otro, si no llevan a cabo el proceso, están violentando los derechos políticos de la ciudadanía.
En lo que si es gato o liebre, lo que todos podemos acordar es que ciertamente es un proceso innecesario, donde va a existir poca participación (como el juicio a expresidentes) pero que espera dejar una herramienta para la ciudadanía futura que pueda encontrarse con presidentes incompetentes que requieran ser expulsados del presidio.
En otros temas, a los que la ciudadanía estamos acostumbrados y que no dejan de ser tan indignantes como cotidianos, es el hecho de que los diputados se aprobaron un aumento al salario por concepto de gasolina por aproximado de $7,000 cada uno. ¿Quién fuera diputado para ganar más que el salario mínimo sólo en gasolina?
Mientras no llega agua a cerca del 5% de la población, mientras que cerca del 40% vive en pobreza, mientras que existe desabasto de medicamentos, los 27 diputados consideran más importante aumentar prestaciones que ya están contempladas dentro de su mismo sueldo desde hace 2 legislaturas, que atender cualquiera de las miles de necesidades que viven los mexicanos, los potosinos, capitalinos o huastecos, los que sean, porque a donde quiera que uno voltea la vista hay necesidades sin cubrir.
Pero este es el cuento de siempre, la maroma perfectamente ensayada por aquellos en el poder, que conocen a esta población sin memoria y mansa.
Y terminamos con lo innegable, la cuarta ola de covid a llegado para quedarse otras semanas más y ahora aparentemente menos brava, pues aumentan los casos de cientos en cientos, pero no así las hospitalizaciones ni los muertos, llega como un ligero catarro para todos pero requiere del mismo tiempo de aislamiento.
Ya estuvo buscando culpables el gobernador en la última semana de Diciembre, y ahora las universidades e instituciones educativas se preparan para las clases en línea, los aforos bajan y las restricciones aumentan; es lo que se debe hacer, aunque nadie quiera. A los enfermos les toca reposar y aislarse, a lo sanos meditar y aislarse, pero más importante, a las autoridades les toca reconocer la situación, tomar medidas, y cuando haya bajado la ola de contagios, no ponerse a hacer eventos masivos en los municipios más importantes del Estado.
Así las cosas. Y recuerden en verdad protegerse tomando las medidas pertinentes y
quedándonos en casa si así se requiere. Todos a tomar nuestras distancia y usar cubrebocas, máxime en esta semana en que el frío llegará a 1 grado solamente.
¡Hasta la próxima!
